martes, 11 de noviembre de 2008

DEBEMOS PROTEGER EL FUTURO DEL PAÍS



El asesinato y el abuso sexual contra los niños en Colombia, es una realidad que desafortunadamente siempre ha existido, pero en los últimos meses ha tomado relevancia para todo el país. Ante tal situación se plantea una interrogante ¿cadena perpetua o pena de muerte contra asesinos y violadores de niños?

Frente a esta interrogante quisiera dejar en claro mi posición. Para todos no es un secreto, es evidente, en los niños esta el futuro de una nación. La cual debemos proteger de todo aquello que la amenaza, en este caso el homicidio y abuso sexual infantil.
Solo en cifras entregadas por el ICFB las denuncias en 2007 sólo por abuso sexual, sin tener en cuenta otros flagelos, fueron 74.430 y en lo que va transcurrido del presente año se han registrado 23.871 casos.

Cifras preocupantes y que reflejan en parte la situación actual de los niños en el país. Considero es necesario fomentar en la sociedad Colombiana en general una cultura por el respeto hacia los niños, a través de campañas de sensibilización para acabar con la raíz del problema.

Por otra parte en cuanto a aquellos individuos en los cuales el maltrato hacia los niños se ha terminado convirtiendo en una patología, como es el caso de los pederastas, pienso que es necesario aplicar castigos ejemplares tales como la pena de muerte o la cadena perpetua.

No obstante se debe considerar algo importante el estado Colombiano nunca aplico sentencias de muerte ni parece tener la voluntad de aprobar sentencias de este tipo, ante esta situación me parece conveniente la búsqueda de caminos legales que permitieran la aprobación en el congreso de la cadena perpetua.

Finalmente pienso que los castigos actuales no son suficientes para persuadir a los adultos de abusar de los menores, por lo tanto se hace necesario tomar medidas como las mencionadas anteriormente para que al fin los adultos en Colombia comprendan que los niños son el patrimonio mas valioso que tiene un país y como tal ha de ser protegido.